Así como el vacio que generó la estela del Boeing 767 que a la postre derribó la aeronave de Juan Camilo Muoriño, este mismo dejó una vacío de liderazgo en el PAN que a más de un año del acontecimiento no ha podido ser llenado.
Es indudable que hoy en día el partido en el poder pasa por una de sus peores crisis en los últimos 2 sexenios. Desde el sexenio de Vicente Fox podíamos ver que desde una oficina del gobierno federal se emitía una postura referente a un problema, para que antes 24 horas y desde alguna otra dependencia, aparecía otra versión no solamente distinta, sino totalmente opuesta a la anterior. Como ejemplo podemos citar las múltiples contradicciones entre la PGR, SEDENA y la Secretaria de Seguridad Publica durante la pasada administración.
Cuando pensamos que lo anterior había pasado y solo era una de esas pesadillas de la política ejercida durante el sexenio de Fox, en días pasados escuchamos como a varios legisladores les dio “declaracionitis” y a diestra y siniestra se escuchaban versiones y opiniones opuestas sobre la ley de ingresos y el presupuesto de egresos del 2010.
Es en verdad penoso ver como varios de los legisladores panistas salieron a los medios a decir que la culpa de los paquetes aprobados era del PRI, y solicitaban además al Presidente Calderón que vetara concretamente la Ley de Ingresos, ante lo cual tuvo que salir a dar la cara el Senador Gustavo Madero y aclarar que Felipe Calderón no iba a vetar lo que los mismos panistas habían aprobado.
Esto refleja, que falta un liderazgo que sea capaz de tomar las riendas de Acción Nacional, que venga y ayude al Presidente para que este pueda delegar en él funciones políticas y que no solamente tengan a su cargo liderazgos que no sean ejercidos como el caso de la coordinadora de la bancada panista Josefina Vázquez Mota, señalada inclusive como posible precandidata a la Presidencia de la República en el 2012 y quien ha brillado por su ausencia en todo el jaloneo parlamentario de las últimas semanas.
Por si lo anterior fuera poco, ante la renuncia de Ruth Zabaleta, sale Cesar Nava a ofrecer las puertas de su partido a una persona de ideas declaradamente de izquierda y opuestas a cimientos ideológicos del panismo.
Lo peor de esto es la exhibida que se llevó públicamente al momento que la diputada, ahora experredista rechazó categóricamente su unión al Partido Acción Nacional, declarando que ella no traicionaría sus ideales y sus creencias a un sistema político. Entonces… ¿Cesar Nava sí?
El panorama para los azules para el próximo año no pinta mejor. Para el 2010 se celebrarán elecciones en 15 estados de la república, de los cuales en 10 se renovarán gubernaturas y la falta de un liderazgo claro, aunado a la decepción sentida en el electorado por la falta de resultados en la lucha contra el crimen y la caída en la economía, hacen ver la PAN como un partido débil para los próximos escenarios electorales. A su vez el partido se muestra como una gran oportunidad para aquel político de estirpe netamente panista, con un liderazgo fuerte y con ideas claras que quiera retomar las riendas del blanquiazul hacia el 2012. ¿Llegará…?
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